viernes, 29 de mayo de 2009

Cenizas de un amor, que hoy arden por otro amor.

Escapo de la polución, sin querer pensar en ella,
Me fugo a un lugar mejor, donde las estrellas pueda ver,
Cerca de la naturaleza, que muestra su belleza,
Muy lejos de ella, alejado de su destreza,
De tenerme atado a su corazón que me desprecia.

Buscaba tranquilidad para limpiar mi alma,
Buscaba tranquilidad que me traiga calma,
Pero apareciste del otro lado del río,
Sentada en la orilla, con tu mirada en el agua,
Preguntándote, quizás, que hacer ahora.

Te invité con un llamado calmo,
Pero tu tristeza no te dejó avanzar.
Entonces fue cuando nuestro sufrimiento se unió.
Y de mi salió una canción.

No dejes llevarte por ese amor que ya no está,
Vive el momento y disfruta hasta el final.
Nunca digas no a los nuevos amores,
Nunca sabes lo que Jah está por enviar.
Cada instante es experiencia, cada segundo una nueva vivencia.

Vayamos allá afuera y luchemos contra la luz de la luna,
Perdamos de vista las estrellas que se fueron,
Sentados junto al fogón pasemos la noche,
Y quememos en él las penas de amor.

Ahora el fuego nos ilumina,
A él le cantamos, y le agradecemos,
Por un nuevo comienzo, por un nuevo amor,
Que por los restos olvidados se formó,
Y ahora podremos volver a luchar a la babilón.


Y debo admitir que siempre hay relatos que no me gustan.
Dreadlock.

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