miércoles, 26 de agosto de 2009

La risa es mi adicción.

Y aún recuerdo cada instante en que una carcajada se escapaba de mi ser para alegrar a los demás. Es que la sonrisa es la que intento tener siempre presente, aún en las dificultades. Con ella demuestro mi felicidad, mis ganas de vivir. Con ella salgo cada día al mundo demostrando que no tengo nada contra él, y lo único que quiero es que los demás tampoco lo tengan. Mi sonrisa es con la cual le saco otra sonrisa a mi madre, a mi padre, en los días difíciles, en los días en que aún no ha salido el sol de su interior.
Mi sonrisa es con la que expreso toda esa diversión en mis ratos entre amigos a la luz más bella, a la luz del sol.
Mi sonrisa es mediante la cual demuestro paz, amor, transparencia y simpatía a los desconocidos.
Mi sonrisa es la que intenta cada día robarte otra sonrisa para alegrar un momento, un instante, un día, a vos, a él, a ella, y a todo aquel al que le regale una de mis cálidas sonrisas.
Qué hermoso sería, ver un mundo de sonrisas, sin rostros de preocupación, frustración, ni estrés. Un mundo en el que todo aquel que cruces en la calle, te regale una sonrisa, en vez de una cabeza gacha que solo demuestra timidez, frialdad, y en algunos casos, miedo.
Te digo a tí hermano, que escuchas mi canción de alegría y sientes inmensas ganas de demostrarle al mundo esa gran sonrisa que el más alto te ha regalado, ayúdame. Sal al mundo cada día, demuestra la gran alegría que tienes, y trasmítela, para ser cada vez más los que sonriamos al pasear.

Dreadlock.

No hay comentarios:

Publicar un comentario